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Villa Constitución 25/08/2025

UTN y el Movimiento Solidario iniciaron un curso de electricidad

Organizado por el Centro Cultural de la Facultad Regional San Nicolás y el MSC, lo dicta el profesor Daniel Gómez. Si bien es gratuito, propone una devolución con una acción solidaria. En este caso, los alumnos harán una práctica real acondicionando las instalaciones eléctricas del comedor y merendero Esperanza.



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El miércoles 20 de agosto dio inicio el curso de Electricidad Domiciliaria, una iniciativa conjunta del Centro Cultural de la Facultad Regional San Nicolás de la UTN y el Movimiento Solidario Constitución (MSC), con la instrucción del profesor Daniel Gómez que se dicta en las instalaciones del MSC. 
Su presidente MSC, Pablo Mei, destacó la doble importancia de este proyecto. “Lo aprendido aquí lo van a volcar para solucionar los problemas de infraestructura eléctrica que tiene el merendero y comedor Esperanza”, afirmó. 
Este modelo de formación no solamente ofrece una capacitación gratuita a los participantes, sino que también les brinda la oportunidad de devolver a la comunidad, aplicando sus nuevas habilidades en un proyecto real y concreto. Mei resaltó la importancia de la UTN San Nicolás en esta iniciativa, calificándola como un “orgullo” para la comunidad de Villa Constitución.
Noelia Barbaro, representante del Centro Cultural de la UTN de San Nicolás, explicó que el curso se enmarca en el programa 1x1, que combina formación universitaria con una acción solidaria. “Si bien tiene una gratuidad económica, nosotros consideramos que el pago con el compromiso social también es importante”, señaló Barbaro. Con 15 años de trayectoria, el programa ha demostrado ser exitoso. En Villa Constitución ya se ha puesto en marcha con cursos anteriores de panadería y repostería que se desarrollaron con cupos llenos. 
Al finalizar, los estudiantes reciben un certificado con acreditación de la UTN, avalado por una resolución de rectorado, que valida sus nuevas habilidades.
El profesor Daniel Gómez, a cargo del curso, describió a los participantes como un grupo “muy heterogéneo”, incluyendo amas de casa y personas sin empleo, todos con un gran entusiasmo. Gómez puso especial énfasis en la seguridad eléctrica, un tema que, según él, presenta muchas falencias en la actualidad. 
Su objetivo es que los estudiantes no sólo se protejan en sus hogares, sino que también puedan tener un ingreso económico y enseñar lo aprendido a otros.
El proyecto final de los alumnos será la mejora de las instalaciones eléctricas del merendero Esperanza, una iniciativa que genera un gran entusiasmo. “Todos se pelean por participar porque cuando uno colabora y ayuda, hay una alegría interna”, comentó. 
La experiencia de trabajar en comunidad, sumada al compromiso de los estudiantes que asisten “hasta con lluvia o con frío” para preguntar y aprender, demuestra el éxito de un programa que no solamente capacita, sino que también fomenta la solidaridad y el desarrollo comunitario.