Villa Constitución 11/10/2023

“Fue un sueño hecho realidad”

Agustina Torrigiani, campeona sudamericana con la Selección Nacional U17 en Perú, arribó a la ciudad y paseó en el autobomba de los Bomberos hasta llegar a Riberas donde la esperaban familiares y amigos. “Fue una gran sorpresa y muy linda. Estoy muy agradecida a todos”, le dijo a Diario La Ciudad.

Agustina está viviendo un sueño. La pequeña gigante, de apenas 15 años y de 1.96 mts, siente que está tocando el cielo con las manos. 
Tras la consagración en Lima, Perú, con la selección Nacional de vóley Sub 17, el pasado miércoles la deportista arribó a la ciudad.
Ante un recibimiento que quedará grabado por siempre en su memoria, Agustina paseó por toda la ciudad en el autobomba de los Bomberos Voluntarios y terminó el recorrido en las instalaciones de la “Academia”, en donde la esperaban todas sus amistades y familiares.
En diálogo con Diario La Ciudad, la campeona sudamericana no ocultó su alegría y expresó: “Lo que viví fue algo grandísimo que, sinceramente, no me lo esperaba. Es más, creo que nadie en la selección se lo esperaba, pero por suerte pudimos llegar a lo más alto y estamos muy contentos”.
Al mismo tiempo, Torrigiani recordó cómo fue el paso a paso hasta la consagración y se refirió a las etapas de concentraciones que fue superando para, luego, quedar en la convocatoria final del seleccionado. 
“Pasaban las convocatorias, fui quedando y, cuando dieron la lista del plantel que éramos 12, realmente no entendía en dónde estaba parada. No lo podía creer. 
Viajamos a Lima, concentramos en lo que sería el Cenard de Perú durante una semana y media, hasta que comenzó el torneo”, detalló la jugadora de posición central y agregó: “Realmente fue todo muy corto, se pasó muy rápido. Participábamos, jugábamos y ganábamos. Fue un sueño hecho realidad”.
Al momento de referirse al desempeño de la Selección, que lo coronó de la mejor manera, Agustina no encontró palabras para describir lo que fueron viviendo paulatinamente con el correr de los días. 
“Íbamos a entrenar, veíamos muchos videos, muchas tácticas de juego. Después, los entrenadores nos decían lo que teníamos que hacer en los partidos y nosotros lo volcábamos en el juego de la mejor manera y funcionaba. Más allá de que enfrentábamos a equipos fuertes, con nuestra táctica a la larga terminábamos ganando y nos pudimos coronar”, resaltó. 
A medida que transitaban los partidos y los triunfos se enfilaban, las aspiraciones comenzaban a ser mayores y la presión se sentía cada vez más. 
En la semifinal, ante Ecuador, Argentina encontró su mejor funcionamiento y, allí, se dieron cuenta que el sueño de ser campeón era posible. 
“Después del partido ante Ecuador, en donde prácticamente no las dejamos jugar, dijimos ‘acá estamos nosotras y queremos clasificar’”, enfatizó. 
Por último, ya con los pies en el barrio, Agustina se refirió al recibimiento por parte de la comunidad y aseguró que no se lo esperaba. 
“La verdad es que no me esperaba nada de todo lo que me sucedió, fue una gran sorpresa y muy linda. Estoy muy agradecida a todos. 
Quiero agradecerle al club; a mis papás que sin ellos no estaría acá; a mi entrenadora que me conoce desde que soy chiquita y me ayudó mucho a estar acá. 
Toda la vida jugué acá en Riberas y lo llevo dentro de mi corazón”.