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Villa Constitución
“Nunca hay que dejar el estudio de lado”
El nombre más importante de las artes marciales en nuestra ciudad, repasó su pasado y, a pesar de sus logros, valoró la importancia de la capacitación de las personas.
ARIEL FRANCO (58), fue el precursor de las artes marciales en Villa Constitución y, cuando vislumbró las virtudes del Taekwondo, se animó a introducirlo en nuestra ciudad. Pionero y hacedor de numerosos talentos locales, algunos de ellos que se treparon a lo más alto del podio internacional, como los casos de sus alumnas Paula Dere y Emilce Oliveri, campeonas mundiales de la especialidad, bajo su tutela.
Después de un corto tiempo alejado del deporte como maestro y mentor, desde hace tres años regresó con su propia escuela y todas las noches, vuelca sus conocimientos y experiencias a los alumnos que nunca lo abandonan.
Con el Taekwondo abriste una puerta que quizás no esperabas en aquel momento
“Exacto, fue una explosión a nivel de reconocimiento de competidores y competencias en el exterior. No se dio en todo el país, pero sí en muchos lugares y Villa Constitución fue uno de los lugares con mayor presencia en todos lados, incluso fuera de la Argentina”.
¿Cómo fueron tus primeros años?
“Nací el 1 de mayo de 1964 en Villa. Mi papá Víctor es entrerriano, mecánico y mi mamá María Ester nació en Peyrano. Tengo una hermana y un hermano y mi primera dirección fue Colón entre Jujuy y Salta y después fuimos a Santiago del Estero 1305. Hasta los 16 años estuve en mi primera casa”.
¿Quiénes eran tus amigos y vecinos?
“Estaban los Medina, Muriado, los hermanos Vangioni con quiénes jugábamos al fútbol todo el tiempo, los Palacios e íbamos a la escuela Mariano Moreno, hasta que nos mudamos a la nueva, porque antes la escuela estaba sobre calle Rivadavia, entre 14 de Febrero y Jujuy. En el edificio nuevo hicimos los tres últimos grados con Mario Corti como director”.
¿En aquel momento; te marcaba más el estudio o el deporte?
“Yo fui un muy buen alumno, porque no me costaba y hasta me cambiaron de segundo a tercer grado porque era muy avanzado. Me gustaba estudiar y me gusta leer mucho, todavía. Yo cometí el error de no seguir estudiando al terminar la secundaria y ponerme a trabajar en el taller que también me gustaba y, hoy, puedo decir que fue una gran equivocación”.
¿Qué carrera universitaria hubieses elegido?
“Aunque muchos se ríen, me hubiese gustado ser médico, me encanta la medicina y aunque hay que salvar las distancias, dentro del deporte y por la función que cumplimos, tenemos que tener ciertos conocimientos y por eso, hice muchos cursos relacionados”.
Es un muy buen mensaje el que estás dejando
“A todo el mundo le digo que estudien, que no paren a descansar, que el saber no ocupa lugar, que se den esa posibilidad de probar”.
Es decir que el trabajo llegó a vos desde la adolescencia
“Desde los 12 años, porque yo llegaba de la escuela y me iba a barrer a la Chevrolet y limpiar piezas, que era la agencia de autos que estaba al lado de la YPF de 14 de Febrero y San Martín y el taller mecánico que tenía”.
Con tu pasión por el deporte, los autos y hasta teniendo un taller. ¿No pensaste en competir?
“Ayudé a muchos automovilistas locales que tenían sus autos de carrera, pero nunca me animé a correr por mi cuenta”.
Después de haber dejado un surco y un enorme camino en las artes marciales de la ciudad, hoy volviste a enseñar
“Marisol, que es mi pareja, fue la que me alentó. Conseguimos la Personería Jurídica y fundamos la escuela Espíritu Libre. Funcionamos en el CEF Chaná Timbú, con filiales en otras ciudades y lugares. Doy clase, corrijo movimientos y me ayudan tres cinturones negros actualizados. Estamos lunes, miércoles y viernes de 20 a 21 y los martes y jueves en Constitución”.
¿Amás el deporte?
“Exactamente y veo que hay muy buenos deportistas en Villa Constitución. Me encantaría que regrese la entrega de los premios Atleta, que se pudieran elegir a todas las disciplinas que tenemos, porque era un empuje enorme. Yo veo que muchos chicos de la ciudad podrían hacer alguna cosa mucho más cómoda y sin embargo entrenan, salen a correr, juegan a otros deportes, andan en bicicleta, etc. Yo amo al deporte”.