Villa Constitución 14/07/2020

“Faltan testeos masivos y un salario de cuarentena”

Ante el agravamiento de la crisis sanitaria y el avance del Coronavirus, el sector afirma que esta situación no puede resolverse “solo con el aislamiento”.

La crisis sanitaria, que ya lleva más de 100 días en Argentina, dio un nuevo salto en nuestra ciudad, con el anuncio de más casos positivos. Las declaraciones del gobierno municipal de Jorge Berti, de la mano de Javier Garceche, fueron las que todos esperábamos: más controles, más aislamiento, pero ninguna medida sanitaria acorde a la situación, mientras que gigantes como Acindar siguen produciendo exponiendo a los trabajadores y al conjunto de la población.
La situación del pueblo trabajador es cada vez más crítica, el Ingreso Familiar de Emergencia otorgado por el gobierno nacional es insuficiente en un contexto en el cual la canasta básica familiar supera los $ 40.000 y ni siquiera abarca a la totalidad de personas bajo la línea de pobreza. Entre ellos, muchos trabajadores informales y changarines, que son los primeros afectados en esta situación por no poder continuar con su trabajo.
En nuestra provincia, la de las grandes cerealeras y puertos, Perotti sigue atacando el salario y las condiciones de trabajo de las y los docentes, que sostienen la educación pública y la continuidad pedagógica en medio de la pandemia.
Villa Constitución, además de ser una de las regiones con mayor desocupación según el Indec, también es una de las zonas con mayores medidas represivas desde que comenzó el aislamiento social. Además de los alarmantes números de detenciones y aprehensiones, al igual que en el resto del país, la brutalidad policial está a la orden del día. Por supuestas violaciones de la cuarentena, la santafesina golpeó a un joven discapacitado, entró a los tiros a una vivienda familiar en Barrio Domingo Troilo y persigue a trabajadores y jóvenes.
Mientras tanto, la situación del Hospital Samco sigue sin estar a la altura de las necesidades. La mayoría de las y los trabajadores de la salud son precarizados y muchos de ellos hace meses que no cobran su salario a pesar de estar en la primera línea de batalla en esta pandemia. A su vez, los insumos y los elementos de bioseguridad siguen siendo insuficientes, exponiendo la vida del personal y de los pacientes.
Esta crisis económica, sanitaria y social no puede resolverse únicamente reforzando el aislamiento. Para que éste sea efectivo es fundamental la realización de test masivos para detectar los focos de contagio y controlarlos. Para garantizar la salud de los trabajadores, es necesario poner en pie comités de seguridad e higiene independientes que controlen la existencia de las medidas de bioseguridad y condiciones de trabajo. Finalmente, la existencia de un salario de cuarentena de $ 30.000 para quienes no perciban ingresos o no cubran la canasta familiar, basado en un impuesto a las grandes fortunas.