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Villa Constitución 27/12/2023

Roberto Míguez se fue dejando una huella imborrable

Falleció el lunes 25 de diciembre. Deportista, comerciante, empresario, gran amigo, familiero. Comenzó desde muy abajo, hasta lograr tener cinco sucursales de Edyfan, el supermercado más importante de Villa Constitución.



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Tenía 83 años y, sin dudas, fueron vividos con pasión entre el trabajo, el fútbol, el golf, sus hijas, su mujer y los supermercados. Murió Roberto Míguez, en una Navidad que se llenó de tristeza por una noticia que conmocionó a la región.
Mucho podríamos decir o escribir acerca de esta figura estelar para la historia de Villa Constitución.
Nació en Rosario y trabajó desde los 13 años, siendo telegrafista en el Ferrocarril para luego dedicarse a la venta mayorista de quesos y fiambres. De esta manera, fue abriendo caminos en toda la zona rural de la región y, sobre todo, en la mayoría de los locales villenses, ayudando a quienes se iniciaban y necesitaban “una mano”. Fue tan grande su labor “de hormiga”, que su fama hizo que pudiera abrir su primer local de Edyfan Supermercado. Fue éste su gran logro y orgullo, llegando a tener cinco sucursales y más de cincuenta empleados en la actualidad, siempre con el acompañamiento de su inseparable compañera de vida, Marta, su esposa.
Con y por Edyfan, llegó a la presidencia del Centro Comercial Industrial y de la Producción, consolidándose como un empresario de elite, reconocido por firmas y marcas de primera línea en todo el país.
Sin importar su condición económica, Roberto siempre se mostró solidario con las instituciones, sobresaliendo su espíritu, generosidad y lealtad.
Dentro del deporte, también marcó con su impronta un camino. Fue futbolista de alma, realizó divisiones inferiores en Rosario Central y llegó a jugar en la Reserva “canalla”. Entrenador de Sociedad Italiana en su mejor momento y, a través de esta disciplina, organizó por más de tres décadas una peña de amigos en su quinta, cocinando y armando partidos de fútbol. Allí nació su apodo de “Nono”. También fue pionero en el golf y un jugador de buen nivel.
Luchador ante la adversidad, positivo en cada situación, amante de la vida, padre ejemplar que transmitió valores a sus hijas y al personal que sigue trabajando en Edyfan.

El recuerdo del Intendente
“Mi contacto con Roberto se inicia cuando yo jugaba con San Lorenzo al fútbol y él era técnico de Sociedad Italiana, siendo uno de los artífices de poner a ese cuadro en un lugar importante en la región y, después, jugué en ese equipo, generando un vínculo muy lindo”, comenzó diciendo Jorge Berti.
Agregó que, a partir de eso, se conformó un grupo de amigos “que íbamos a jugar al fútbol a su quinta y comer todas las semanas. Siempre me asombró que una persona, pusiera a disposición su casa para tantas y tantas personas que pasamos por ese lugar”. Además, recordó que Roberto Míguez “nos servía, nos atendía, hacía las ensaladas, se ocupaba de acordarse de nuestros cumpleaños mostrando un don de servicio difícil de encontrar en otros”.
La máxima autoridad de nuestra ciudad, lo definió como una persona “caliente y competitivo para jugar a la pelota, chistoso, alegre, serio cuando era necesario, pero siempre teniendo en cuenta la importancia de la amistad sin importar de donde viene o que es lo que hizo”.
Aseguró que la “quinta del Nono” era el mejor lugar para juntarse entre amigos. “Lo vamos a extrañar. Ya lo estábamos haciendo en los últimos tiempos que no podía ir por su problema de salud. Habrá un antes y un después para muchos de nosotros, a partir de todas las actividades que concentrábamos con Roberto”.
Finalmente, Jorge Berti señaló: “Particularmente, siempre me daba mucho ánimo para encarar las cosas por la ciudad y renegábamos juntos por lo mucho mejor que podríamos ser como sociedad”.